Simba es un macho de 1 año, de unos 20 kg. Es muy bueno, cariñoso y juguetón.
Es uno de esos cachorros que salvamos junto a su mamá, Venus, de morir ahogados el año pasado cuando se avecinaban unas lluvias. Vuelve con nosotros después de todo este tiempo viviendo en una casa. Ahora hay que volver a buscarle un hogar, lo peor de todo es que ya no es un cachorrito de cara a posibles adoptantes, necesitamos una familia especial que sea capaz de ver su cachorro interior. ¿A qué esperas para conocerlo?